El principito se va de su planeta en busca de respuestas, tiene muchas preguntas y ganas de descubrir todo aquello que lo rodea y desconoce. Quiere entender el porqué de lo que siente, de lo que ve, de lo que entiende y lo que no entiende, de lo que aprecia y lo que anhela.

La Aviadora ha renunciado a sus sueños, a su esencia para hacer aquello que se supone que tiene que hacer, para encajar, para hacerse grande y ser aceptada. Se encuentran en un desierto donde solo están ellos dos. Juntas descubrirán el poder del amor y la amistad. Entenderán que el más importante de la vida no se puede ver ni tocar, que lo que realmente importa es invisible en los ojos. Aprenderán a quererse con todo lo que esto comporta y probarán lo amargo de las despedidas.